Con independencia del grado de fibrosis, se debe indicar el tratamiento en pacientes con elevado riesgo de trasmisión y mujeres en edad fértil que deseen un embarazo.
El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, presentó ayer las principales líneas del nuevo Plan Estratégico de Hepatitis C, acompañado por el Comité de Expertos que lo han elaborado. Entre sus directrices figura tratar con distintas combinaciones terapéuticas a todos los pacientes con fibrosis F2, F3 y F4, que ascienden a 51.964 entre un total de 95.524 diagnosticados en todos los grados de la patología, para lo que se empleará 727 millones de euros
El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, presentó ayer jueves en la sede ministerial, el nuevo Plan Estratégico para el Abordaje de la Hepatitis C que tiene como objetivo principal disminuir la morbimortalidad causada por este virus, así como mejorar la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y el seguimiento de los pacientes.
Durante la presentación, Alonso estuvo acompañado por los miembros del Comité de Expertos encabezados por el hepatólogo Joan Rodés, además de miembros de su equipo, entre ellos el secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, los directores generales de Salud Pública, Cartera Básica de Servicios y Ordenación Profesional, Javier Castrodeza, Agustín Rivero y Carlos Moreno, respectivamente.
En el Plan se destaca, entre otros aspectos, la necesidad de emplear los nuevos antivirales contra esta enfermedad, que simplifican el tratamiento, reducen las necesidades de seguimiento, aumentan las tasas de curación y retrasa la aparición de complicaciones, para un amplio grupo de pacientes. En concreto, se indica tratar con distintas combinaciones, según el genotipo, a todos los pacientes con fibrosis en grado F2, F3 y F4 que ascienden a 51.964 pacientes sobre un total de 95.524 diagnosticados en el conjunto del país, según los datos aportados por las CC. AA. Se calcula que la duración media de los tratamientos se sitúa, por lo general, en 12 semanas (aunque ocasionalmente la duración puede ser superior o inferior) y como remarcó el ministro de Sanidad «serán prescritos por el médico especialista». En este sentido, destacó que uno de los logros es la inmediatez con la que los enfermos que lo necesitan van a recibir los medicamentos, calculando que «no pasarían más de tres semanas entre la prescripción por parte del facultativo hasta la dispensación del fármaco correspondiente».
Para hacer frente al pago de estos tratamientos, el ministro explicó que se ha establecido un techo de gasto de 727 millones de euros, que supondrían unos 242 millones anuales en un plazo de 3 años, con el fin de que los servicios de salud puedan asegurar el acceso a estos medicamentos a los pacientes de manera inmediata, estimada en tres semanas, a los que se los prescriban los hepatólogos en base a los criterios incluidos en el Plan.
Alonso aseguró, al respecto, que se está trabajando con el Ministerio de Hacienda para aportar garantías de financiación a las CC. AA. «Las autonomías podrían necesitar ayuda económica y para ello se ha contado con el Ministerio de Hacienda». En este sentido, el ministro avanzó que se ha fijado una reunión para el próximo lunes, 2 de marzo, con representantes autonómicos para darles todo tipo de detalles sobre los aspectos económicos de la Estrategia. El paso siguiente que tiene previsto dar el Ministerio es la aprobación definitiva del Plan de la Hepatitis C por el Consejo Interterritorial del SNS tras lo cual entraría en vigor por tiempo indefinido.
Durante su intervención el titular de Sanidad detalló una serie de aspectos sobre los tratamientos farmacológicos como la incorporación de tres nuevos medicamentos: Harvoni (una combinación de sofosbuvir más ledipasvir), Vikerax y Exviera (una combinación de cuatro principios activos: paritaprevir, ritonavir, dasabuvir y ombitasvir). Estas incorporaciones fueron acordadas, según Alonso, en la Comisión Interministerial de Precios de los Medicamentos del pasado 23 de febrero.
Asimismo, Alonso indicó que «en la negociación se han empleado las fórmulas de riesgo compartido, una tarifa plana, es decir, que el SNS paga lo mismo si el tratamiento dura las 12 semanas establecidas que si hay que ampliarlo a 24 semanas, el precio por volumen (a más pacientes baja el precio) y el techo de gasto».
Cuatro líneas de trabajo
El Plan Estratégico para el Abordaje de la Hepatitis C pivota sobre cuatro líneas de trabajo tal como se explicó durante su presentación:
–Conocer la magnitud del problema y prevención: En esta línea, el comité de expertos ha recomendado realizar un registro de pacientes con hepatitis C tratados con antivirales en el Sistema Nacional de Salud. Además, proponen varias medidas orientadas a la prevención, como la puesta en marcha de una página web para informar a la población, los programas de cribado neonatal en mujeres con mayor riesgo de exposición a la infección y de reducción de daños en el ámbito de Instituciones Penitenciarias.
–Establecer la estrategia terapéutica: En este punto, los expertos recomiendan tratar con los nuevos antivirales a pacientes tanto monoinfectados como coinfectados con el VIH. Dentro de ellos, los pacientes prioritarios son los siguientes: Pacientes con fibrosis hepática significativa (F2 a F4) con independencia de la existencia o no de complicaciones previas a la hepatopatía; Pacientes en lista de espera de trasplante hepático o trasplantados (hepáticos que hayan vuelto a infectarse y no hepáticos con hepatitis C); Pacientes que no hayan respondido a la triple terapia con inhibidores de la proteasa de primera generación; y Pacientes con hepatitis C con manifestaciones extrahepáticas clínicamente relevantes del virus de la hepatitis C, sea cual sea el grado de fibrosis.
En cualquier caso, y también con independencia del grado de fibrosis, se debe indicar el tratamiento en pacientes con elevado riesgo de trasmisión y mujeres en edad fértil que deseen un embarazo.
–Mecanismos de coordinación. Entre ellos, los expertos destacan la necesidad de garantizar el acceso a los nuevos antivirales en condiciones de equidad para los pacientes que lo precisen y, a la vez, monitorizar la efectividad terapéutica y los resultados de salud en los pacientes.
-I+D: El Plan elaborado por el comité de expertos prevé estudiar los eventos específicos relacionados con la prevalencia e incidencia de la infección y desarrollar líneas de trabajo con financiación a través del Instituto de Salud Carlos III.
El ministro concluyó su intervención expresando su satisfacción por el resultado del trabajo asegurando que el Plan Estratégico «es único en el mundo, no tiene precedentes para el SNS salvo la estrategia del VIH».
En la elaboración de dicho Plan han trabajado, además del Dr. Joan Rodés, Agustín Albillos, jefe de Gastroenterología del Hospital Ramón y Cajal de Madrid y catedrático de Digestivo; Alfonso Moreno, catedrático de Farmacología de la Universidad Complutense de Madrid; Javier Crespo, jefe de servicio de Digestivo del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, en Cantabria; María Buti, jefa de servicio de Medicina Interna, servicio de Hepatología, del Hospital General Universitario Vall dHebrón de Barcelona; Antonio Andreu, especialista en bioquímica clínica y director del Instituto de Salud Carlos III de Madrid. En cuanto a expertos internacionales figuran Massimo G. Colombo, catedrático de Gastroenterología en la Universidad de Milán (Italia), y editor jefe del «Journal of Hepatology», Michael Manns, director del Departamento de Gastroenterología, Hepatología y Endocrinología de la Escuela de Medicina de Hannover (Alemania), Jean Michel Pawlotsky, profesor de Medicina en la Universidad de París-Est y director del Centro Nacional de Referencia para Hepatitis Víricas y del Departamento de Vorología en el Hospital Universitario Henri Mondor, en Créteil (Francia).
Asimismo, han participado las Comunidades Autónomas, que han aportado registros, genotipado y grado de fibrosis de sus pacientes, además de la información sobre centros y unidades especializadas. También los consejos profesionales de Medicina, Enfermería y Farmacia, las sociedades científicas implicadas y las asociaciones de pacientes.
MSSSI