Los nuevos infectados por VIH en España tienen una esperanza de vida similar a la población general

Según el informe ‘Vivir y envejecer con el VIH: desafíos en la gestión del VIH en España’

Intervención de Jesús García, presidente de Adhara Sevilla
Intervención de Jesús García, presidente de Adhara Sevilla

Los nuevos diagnosticados por VIH en España en la actualidad, con una media de 36 años (aunque la edad de infección está en los 33), tienen una esperanza de vida similar a la del resto de la población general debido a los nuevos tratamientos con toxicidades reducidas, según un estudio realizado por The Economist Intelligence Unit, con el patrocinio de Gilead, presentado este martes en Madrid.
Esta investigación, titulada ‘Vivir y envejecer con el VIH: desafíos en la gestión del VIH en España’, ha evaluado la situación de la infección por el VIH en nuestro país, su diagnóstico, el envejecimiento de los pacientes y las comorbilidades, así como sus necesidades médicas aun por cubrir.
El informe reconoce que se ha producido un «notable incremento» de la supervivencia y de la esperanza y la calidad de vida de los pacientes, si bien casi la mitad de ellos actualmente tiene más de 50 años y éstos deben enfrentarse a problemas derivados tanyo del envejecimiento anticipado como a los efectos secundarios debidos a las toxicidades acumuladas por los tratamientos anteriores a los que han sido sometidos a los largo de los años.
Es en estos pacientes con edades mayores en los que también se presentan a comorbilidades asociadas a la evolución de la enfermedad o a ese envejecimiento prematuro, como patologías renales, cardiovasculares, óseas o pulmonares, que también se ven afectados por hábitos de vida poco saludables.
Así, diferencia una primera generación que contrajo el VIH hace décadas, cuando no había tratamientos eficaces y han sufrido muchas complicaciones médicas; una segunda, de los diagnosticados cuando los tratamientos empezaron a ser más eficaces, pero aun altamente tóxicos, por lo que se enfrentan también a sus efectos, y una tercera, la de los que han sido tratados con procedimientos con una toxicidad reducida, lo que ha incrementado su eficacia y su esperanza de vida en 10 años.
OBJETIVO DE ONUSIDA 90-90-90
EL informe recuerda que en 2014, el programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH, ONUSIDA, estableció los objetivos 90-90-90. Su finalidad sería conseguir que el 90% de todas las personas que viven con la enfermedad conozcan su condición, que el 90% con la infección diagnosticada estén en tratamiento antirretroviral y que el 90% de los que reciben dicho tratamiento tengan supresión viral en 2020.
El diagnóstico para España en función de este objetivo sería buena ya que, según el informe, el 82% de la población española con VIH ha sido diagnosticada, el 92% de los pacientes están recibiendo el tratamiento, y respecto a la supresión viral, se está cerca de cumplir el objetivo, con un 88%.
La parte negativa es que, el número de diagnósticos, aunque bajó ligeramente entre 2010 y 2015, sigue sin disminuir, ya que se mantiene en torno a los 3.500 nuevos casos de infección al año. Los expertos señalan que el repunte de las nuevas infecciones hace necesario mantener la «guardia alta» ante esta patología. En 2015, el 14% de los nuevos diagnosticados tenían más de 50 años, frente al 7,7% en 2014.
Y, además, el informe advierte de que aún se mantiene «el estigma social y la discriminación asociados con el virus».
La investigación admite que parte de la complejidad de abordar las poblaciones de VIH en España se debe a la dificultad de identificar poblaciones muy diferentes de infectados con el virus. Así, los hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres representan más de la mitad de las nuevas infecciones, mientras la transmisión heterosexual supone otra cuarta parte. Sin embargo, los consumidores de drogas son ya porcentaje más pequeño, y en uno de cada cinco casos no llega a determinarse el modo de transmisión.
Por ello, el informe advierte de que, de no abordarse de forma urgente los nuevos retos a los que se enfrentan los pacientes infectados por el VIH, los objetivos de ONUSIDA para el año 2020 no podrán ser alcanzados y se producirá un incremento notable de los costes asociados al manejo de esta enfermedad.
El acto ha contado con la participación de expertos nacionales e internacionales en la materia como el doctor Jeffrey Lazarus, ISGlobal, Hospital Clínic y VHIO, Rigshospitalet, University of Copenhagen; el doctor Esteban Martínez, profesor asociado de Medicina, enfermedades infecciosas del Hospital Clinic de Barcelona; Roberto Nuño-Solinís, Director Deusto Business School Health, Universidad de Deusto; Vivek Muthu, jefe de The Economist Intelligence Unit Healthcare; Pep Coll, coordinador organización clínica irsiCaixa AIDS Research Institute; Jesús García Carrillo, presidente de Adhara, portavoz de políticas sanitarias del PSOE en el Congreso y Bisi Alimi, abogado sanitario y activista derechos humanos.
Agencias

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