Una de las acciones más urgentes en la respuesta al VIH es la erradicación del estigma y la discriminación. Los prejuicios y los estereotipos negativos siguen existiendo en contra de muchas personas en la sociedad por razones de género, etnia, edad, nacionalidad o estado serológico. La exposición prolongada a experiencias de discriminación tiene consecuencias negativas en

la calidad de vida de las personas, ya que vulneran sus derechos, coartan su movilidad social y limitan su desarrollo social y psicológico.

¿Qué queremos conseguir?

Queremos acabar con la discriminación. La respuesta social al VIH está influida por las representaciones de los medios de comunicación. El lenguaje utilizado sobre el VIH es un reflejo de la realidad social, vinculado a nuestros paradigmas y prejuicios, y forma nuestras actitudes en relación a la epidemia y a las personas afectadas.

Existe evidencia de que la discriminación afecta negativamente en la calidad de vida de las personas con VIH. La estigmatización se ha visto empíricamente vinculada con salud física y mental disminuida, con baja satisfacción personal, con un deterioro en el rendimiento, con mortalidad infantil, con pobreza, y acceso limitado a vivienda, educación y trabajo.

¿Cómo lo hacemos?

Mediante este proyecto trabajamos para que los medios de comunicación sean nuestros aliados para eliminar las construcciones negativas sobre el VIH y enfrentar la discriminación. En CESIDA nos esforzamos para transmitir a las personas comunicadoras su responsabilidad en desmitificar y eliminar los prejuicios. Creamos y difundimos información y campañas sobre el VIH, a través de mensajes libres de estigma y discriminación hacia las personas con el VIH y su entorno. Fomentamos entre las entidades de VIH la utilización en sus campañas de mensajes con directrices comunes, de carácter positivo y con información rigurosa y correcta.